Cada mañana, puntual como quien toma el café a la misma hora, sacaba a pasear a su planta. Durante diez minutos imperaba el silencio. Y en ellos, sucumbía el entorno gris al de las hojas verdes, mecidas por una suave brisa que nadie, nadie sabía de dónde venía.
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Vaja història més cinematogràfica que has reflectit avui. M'agrada molt la l'idea i la realització.
ResponderEliminarUna abraçada
Bonita historia, podría ser incluso real ¿quién sabe?, es la magia de la fotografía, de la buena fotografía, que permite imaginar a partir de su narrativa
ResponderEliminarUn abrazo Jan
Hola Jan, no me puedo creer que saque cada día la planta de paseo, jajajaja.
ResponderEliminarPero bien podría ser.
Un abrazo
me gusta
ResponderEliminarQué bonitoooooOOOOOOOO
ResponderEliminarEste podria ser el principio de una bonita historia¿porque no será real?.
ResponderEliminarSAludos.
Es que no hay nada como hacer cualquier actividad en buena compañía.
ResponderEliminarUn abrazo, Jan.
Cada loco con su tema ¿porque no? Parece un fotograma o secuencia de pelicula. Buen trabajo.
ResponderEliminarSaludos.