Como sabéis los que sois asiduos a este espacio, los viernes publico la fotografía de un perro abandonado de los muchos que voy encontrándome en mi camino. A cada uno de ellos, simbólicamente le doy un nombre en función del momento o la situación. Siempre relacionado con su aspecto o que su gesto me inspire.
En ocasiones, mis pasos me han llevado a pasar por el mismo sitio y me llevo sorpresas desagradables al saber de la muerte o la desaparición de alguno de ellos. Pero de vez en cuando quedo asombrado de la buena voluntad de alguna persona quien se encarga de un perro abandonado, terminando este siendo parte de su núcleo familiar.
Hoy sin ser viernes he decidido presentaros al este precioso perro callejero –mezcla de labrador y otro que no llego a saber- quien desde hace un par de meses tiene casa nueva. Vive en el número 671. En ocasiones, hay cuentos reales que terminan bien.
La imagen la tengo englobada en la serie de amaneceres personales entre otras cosas por la temprana hora en que la realicé.
Las imágenes de este blog están subidas a una resolución de 1024.
Con un clic sobre la imagen las veréis a pantalla completa.
Si quieres ver la serie completa clica aquí:
Copyright © By Jan Puerta 2009
Texto y fotografías con copyride del autor.
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Que bueno, por lo menos siguen habiendo personas con un corazón tan grande como este bellisimo perro, no sabes cuanto me alegro de que nos ofrezcas buenas noticias, sería conveniente cambiar el espacio de los viernes por el de los lunes con noticias agradables como esta. Un fuerte abrazo amigo Jan
ResponderEliminarMe ha conmovido esta fotografia, amigo Jan, y no sabria decirte por qué...
ResponderEliminarUn abrazo.
HOLA JAN:
ResponderEliminarPARECE UN PERRO LABRADOR, ES PRECIOSO.
UN ABRAZO, Montserrat
Ahh, vivo con dos de ellas. Me los llevaría todos. Se me parte el corazón cada vez que veo fotos así, además ya he "recuperado para sus dueños" unos cuantos. Un abrazo.
ResponderEliminarComo 671 es "Sola", que ahora es "Lola". Estuvo mucho tiempo viviendo de la caridad hasta que fue adoptada total y definitivamente.
ResponderEliminarAhora comparte familia grande con otros 14 ó 15 animalitos, de los cuales tres los tengo yo: Moly, Berto y Gumi. También pasaron por esta casa Lina, Trufa, Paul I, Paul II y Pancho.
Bueno lo que quiero decir es que no comprendo cómo se puede abandonar un animal así. El mejor amigo del hombre se convierte en el más incomprendido ser por el hombre. Estoy seguro que si se llegara a entender de qué manera dependen ellos de nosotros, no lo haríamos.
Así que todos los viernes haces esto. Vendré a visitarte.
Es gratificante saber que ha encontrado casa...y a propósito, el personal estilo arquitectónico de esa morada es digno de destacar!jejejeje
ResponderEliminarSaludos.
Una fotografía perfecta llena de detalles: el perro y por sobre todo su mirada; la gravilla de las paredes; el color de la puerta; el árbol reflejándose en el vidrio sobre la puerta; el número 671; los hongos o musgos en los escalones; hay un sin fin de detalles donde posicionar la vista pero ninguno de ellos distrae de elemento principal que es el pero en contemplación.
ResponderEliminarFelicitaciones es una composición sencillamente perfecta.
Un abrazo.
Bonita foto en la que observo a una perro sentado plácidamente en la puerta de su casa, como un señor. El solo necesita que se le quiera. La arquitectura, la decoración, el dinero, o el barrio, no le importa nada. Natural!!!
ResponderEliminarGracias Jan por esta bonita estampa.
Bellísima serie. Me gusta verla tranquilamente y esta noche he encontrado un hueco...
ResponderEliminarBuenas noches, de nuevo, Jan Puerta:
ResponderEliminar¡Qué tranquilo y a gusto se le ve al ¿mastín leonés-labrador? en esa puerta.
Tiene un lugar reservado para poder beber, y hasta un juguete.
En la casa es muy posible que haya niños.
Saludos. Gelu
P.D.: Me ha encantado el número 6-71