La milicia divina

Retablos de caballeros andantes

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Los jueves leemos el Quijote con Pedro Ojeda

Cap. 2.58

Que mejor manera de empezar un extraordinario capitulo que una oda a la libertad. Así se los cuenta Don Quijote a Sancho. Es como si todo aquello que ha permanecido encerrado entre las paredes de la ínsula de Sancho y las propias de los duques, donde se encontraba Don Quijote, se hubieran resquebrajado dejando salir a la luz todo aquello que encontraban a faltar. Esa ausencia de libertad termina por hacerlos más libres si cabe de lo que eran antes de su encuentro con los duques.

El capitulo en si es fantástico. Diría que un capitulo único dentro de la obra cervantina. En encuentro que se produce con la docena de hombres vestidos de labradores (que quizás no lo eran) y portaban las imágenes talladas son el preámbulo para que Don Quijote, conocedor sin par del mundo en el que vive, hable sobre ellos vinculándolos al noble arte de los caballeros andantes. Empieza por San Jorge, continua con San Martín. Hace hincapié en la figura de San Diego Matamoros y termina con San Pablo. Además de explicar a Sancho el porqué de una refrán que él, no comprendía… “¡Santiago y cierra España!”

La descripción detallada que hace Don Quijote de los cuatro es merecedora de una lectura pausada y tranquila para darnos cuenta del conocimiento que tenia sobre los mismos, dejando al propio Sancho con la boca abierta. También lo hizo con los labradores.

Si antes, Sancho ya pensaba que su señor tenía gran conocimiento sobre todas las cosas, ahora reconoce cual es su papel a su lado. El del fiel escudero.

A partir de aquí, Sancho habla de sus dudas sobre el enamoramiento de Altisidora, no entendiendo el cómo podía enamorarse tan buena moza de su señor. Este, con su complaciente locura insiste en que todo es posible.

Curiosa es la manera de Cervantes de romper la lógica que parecía haber cobijado a Don Quijote creando a su imagen y semblanza una corta y jocosa historia que terminó con los huesos de ambos maltrechos por culpa de toros bravos y unos cabestros un tanto descontrolados.

“Quedó molido Sancho, espantado don Quijote, aporreado el rucio y no muy católico Rocinante, pero en fin se levantaron todos”

Después de esto, siguieron camino. Eso sí, magullados y cabizbajos.

Veremos que nos depara el capitulo 59

Imágenes quijotescas:

La imagen corresponde a nuestros dos personajes. Esta vez tallados en madera, colgados en un amplio y soleado comedor con unas buenas vistas al océano Pacífico.

Grabados quijotescos:

Una edición italiana con dos grabados alegóricos al capítulo de hoy.

Esta curiosidad corresponde a 1953. En Alemania se publico una extraña aventura entre el Barón de Münchhausen y Don Quijote.

Enlace quijotesco curioso:

Andrés Iniesta se convirtió en un héroe a razón del gol que marcó ante Holanda y significo el que España ganara el campeonato del mundo de futbol. Un artículo de Ángel González en el Mundo.es retrataba muy bien la similitud de Don Quijote y el mismo Andrés Iniesta.

http://www.elmundo.es/mundial/2010/2010/07/11/espana/1278885123.html

Vídeo quijotesco:

Esta vez la Juvenil sinfónica de Hawái nos deleita con un pasaje del Hombre de la Mancha:

Con un clic sobre las imágenes las veréis a pantalla completa.

“Quijote”
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