Las dos últimas entradas están situadas en Viña del Mar. La de hoy, también. En la avenida Valparaíso, donde están emplazadas casi todas las tiendas de moda, y los mejores establecimientos de la ciudad denominada jardín.
No suelo elegir muchos edificios representativos de las ciudades que visito. Es una deformación casi enfermiza pero que obedece a un patrón profesional muy particular. Siempre que fotografió alguno, es por las circunstancias que acompañan a la imagen. En las últimas entradas, como habréis podido comprobar, los pensamientos van sujetos a la imagen o viceversa.
Los bancos callejeros situados estratégicamente en las avenidas siempre me sedujeron. Suelo buscar uno cuando las condiciones de luz en su entorno me sean favorables y me permitan obtener la imagen deseada.
Me siento y empiezo a disfrutar con lo visto. Cualquier detalle es bueno para ejercitar el don de la crítica visual, el análisis y los posteriores razonamientos que de ello se derivan. La imagen de hoy corresponde a unas divagaciones sobre lo visto, oído y simplemente observado…
La imagen la podríamos situar en cualquier capital europea, en el mismísimo Nueva York o en la densamente poblada Shanghái. El caso es que una persona, destaca por encima de todas por su apariencia y la seguridad con la cual se mueve entre otras personas que ajenas a todo, parecen vivir en una dimensión paralela.
Son de esos contrastes visuales tan enfáticos que nuestro instinto obliga a nuestra propia incredulidad a refregarse los ojos por no creer lo que está viendo. Quizás sin saberlo, formemos parte de los figurantes de un film surrealista de la mejor factura posible y no seamos conscientes de ello.
Realice una sola toma, me levante y me alejé sin mirar hacia atrás. No por nada especial, ya que la escena en si me parecía insuperable.
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Copyright © By Jan Puerta 2010
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Como muy bien reza en un cartel de la fachada "Arte", es lo que tiene está joven al andar, con porte y elegancia, contrastando con los musicos callejeros, como bien dices podría haber sido tomada está foto en cualquier lugar europeo, un fuerte abrazo Jan
ResponderEliminarGenial!
ResponderEliminarSe me antoja:
"preparados, listos, acción" y tú al momento: CLIK!
Saludos.
Abigarrada y llena de cruces de todo tipo esta imagen. Me gustan tus fotos en pausa, me gustan estas llenas de vida.
ResponderEliminarLa imagen me alucina, tu modo de realizar el trabajo de captura me parece interesante y tus reflexiones son la leche. Sí señor, es cierto que a veces una mira y cree estar viviendo en el interior del celuloide de alguna peli.
ResponderEliminarHoy me gustó mucho todo.
Saludos y gracias.
Hola jan hiciste bien en no volver la vista atrás, porque no creo que hubiera cuadrado otra foto como ésta, pero bueno hubiera sido simplemnte distinta.
ResponderEliminarEse cruce de personas le da mucha fuerza a la foto
A mi me suelen acompañar esos pensamientos y sentimientos también con todo lo que me rodea.
ResponderEliminarSólo ver el rostro de alguien en la calle abre grandemente las puertas de la persuasión...
Todo un mundo, toda una vida, cada cual con sus gigantes y sus enanos a cuestas.
Un auténtico desfile de modelos... y con música en vivo (eso no lo tienen todas las pasarelas) :)
ResponderEliminarHas creado un efecto óptico mágico, Jan. La 'modelo' que cruza el paso de cebra hace girar toda la escena hacia su derecha con una fuerza imparable.
dos abrazos y un beso
La foto nada mas verla sin leerte ya me llamo la atención...tiene tantos detalles y cuenta tantas cosas que habla por si sola.
ResponderEliminarcreo que de hoy en adelante aprendere un poco de ti y me sentare en un lugar a mirar lo que pasa a mi alrededor.
Besos
Muchas veces tenemos una autentica passarela delante de nosotros y se nos escapa sin darnos casi cuenta.Yo creo que escojiste el mejor momento de la foto ya que su conjunto tiene mucha fuerza.
ResponderEliminarUn saludo
En cierto modo, todas las ciudades se parecen...
ResponderEliminarObservar la vida, qué mejor ejercicio para disfrutarla!!!
ResponderEliminarUn abrazo