“Homo caballus” o la leyenda de la sombra del Centauro.
Ensayo seudocientífico.
Camino susceptible siguiendo los pasos que dio Darwin. El, incrédulo aun, sobre la libertad de sus pensamientos, terminó siendo juzgado por una teoría evolutiva centrada en las especies. Hoy, tiene tantos seguidores como detractores.
Yo, que no soy científico, pero si curioso y ante tal castigo, observo a mis semejantes, a veces veo cosas que solo son posibles en un instante. Afortunadamente, tengo la cámara para intentar avalar con la imagen aquello que percibo.
Quizás parte de la humanidad venga del mono. Pero también podría llegar a pensar que otra parte importante viene del Centauro. Pero solo en ciertas épocas del año, en ciertos rincones del mundo, las sombras muestran parte de la realidad de nuestra evolución.
Seguiré informando sobre estos descubrimientos.
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Un disparo y reflexión solo al alcance de quien posee mirada una lúcida.
ResponderEliminarSaludos.
Brutal juego de luz y sombras....me encanta.
ResponderEliminarun abrazo.
Estuviste listo y rápido para pillar ese juego de pasos.
ResponderEliminarBuena reflexión.
Abrazo
fantastic game with dark and light! muy especial! me encanta mucho! saludo de Hilde (Belgica)
ResponderEliminar¡Muy original! Saludos.
ResponderEliminarEn mi caso sería un pequeño poni jejeje
ResponderEliminarUn abrazo.
El juego que propones entre palabras e imagen es perfecto, gracias.
ResponderEliminarHabía oído hablar del hombre lobo, pero no del hombre centauro :). Una captura genial con esas sombras. Y buena reflexión.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
Me quedo sin palabras, Jan... me gusta muchísimo :)
ResponderEliminarun abrazo