He de reconocer, aunque esto suponga mofa y escarnio por parte de la concurrencia que en cierta ocasión, me entusiasme por este deporte llamado “skateboarding” y pensé en transformarme en un “skater”
El caso es que nada más subirme por primera vez en una de estas endemoniadas tablas, me vi en el suelo ante la atónita mirada de los presentes, los cuales al unísono me animaron a levantar no sin antes interpretar una aria de carcajadas diversas e hirientes.
Ante tal actitud, opté por dejar la tabla y con los ahorros me compré una máquina de hacer fotos que aún conservo, para venganza por mi parte si la ocasión lo requiere.
Cuidado que cualquier día vuelvo.
Paradojas de uno que vio y probo la dureza del asfalto.
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te entiendo, a mi esos aparatejos no me gustan nada, nada y la cámara es más segura, además de que te permite.... bueno, desquitarte.
ResponderEliminarBesos
Siempre me quedo mirando a estos equilibristas que se pasean por la ciudad en una tabla y arriesgan su integridad física; vivir al límite y el riesgo , nos acompañan desde tiempos ancestrales.
ResponderEliminarUn barrido muy conseguido!!!
Saludos
Com sempre una magnífica imatge. Crec que veient els resultats, el canvi del patí per la càmera va ser tot un encert.
ResponderEliminarUna abraçada
Mejor con los pies al suelo jeje ... buena semana.
ResponderEliminarJo encara tinc un trinxet al cap...també vaig fer de les meves amb aquest deport fatal, jajajaja...
ResponderEliminarCom per qualsevol cosa es necessita pràctica i a la primera vegada es lògic caure.
ResponderEliminar'L'skate' fa any que forma part de la meva vida quotidiana (no sóc jo qui e practica)
El canvi va ser un encert pels que mirem la teva feina,
Abraçades