Deberíamos de perdernos más a menudo. Olvidarnos de los mapas y las rutas establecidas por otros. Perdámonos sin más. Juguemos a ser aventureros en pleno siglo XXI.
Sorprendernos a nosotros mismos es romper con lo establecido.
Conduje durante dos horas por un polvoriento camino sin saber muy bien a donde me llevaba. La aridez del paisaje nunca me desanimo, sino todo lo contrario. Pregunte a alguien en el camino y me dijo que más adelante se encontraba Tilama. Entonces añadió…Sorprendernos a nosotros mismos es romper con lo establecido.
.-Pero no hay nada en Tilama.
Afortunadamente no le hice caso.
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"Pensamientos con imagen"
Copyright © By Jan Puerta 2009
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Después de todo, todo ha sido nada,
ResponderEliminara pesar de que un día lo fue todo.
Después de nada, o después de todo
supe que todo no era más que nada.
Grito «¡Todo!», y el eco dice «¡Nada!».
Grito «¡Nada!», y el eco dice «¡Todo!».
Ahora sé que la nada lo era todo,
y todo era ceniza de la nada.
No queda nada de lo que fue nada.
(Era ilusión lo que creía todo
y que, en definitiva, era la nada.)
Qué más da que la nada fuera nada
si más nada será, después de todo,
después de tanto todo para nada.
José Hierro
Abrazo fuerte querido Jan.
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Fantastica...buena tu intuición de seguir adelante...un abrazo aventurero
ResponderEliminarSeguiste adelante y te encontraste con esta Bella Ermita.
ResponderEliminarBon Cap de Setmana, desde Valencia, Montserrat
No recuerdo quien dijo "las sombras no existen. Lo que tú llamas sombra es la ausencia de luz". Me ha enganchado esa "falta de luz" de tu fotografía... qué bien que no hiciste caso :)
ResponderEliminarbeso y buena semana querido amigo
Esa iglesia tiene aspecto de lugar al que uno sólo puede ir a perderse, en efecto. Y no volver.
ResponderEliminarPerdernos, dejarnos llevar... y conocer así las maravillas hasta entonces escondidas. Besos!!!
ResponderEliminarMuy de acuerdo contigo: afortunadamente no le hiciste caso.
ResponderEliminarAlgo había que merecía la pena.
ResponderEliminarEsta preciosa ermita. Me hubiera gustado verla por dentro.
Un abrazo.
Afortunada tu pérdida por ese camino polvoriento: mereció la pena.
ResponderEliminarUna foto especial i mes creus. Tilama.
ResponderEliminarSemble al bell mitg del camí. Si una cosa hi ha que no es pugui criticar de l'Esglesia, es la construcció i conservació de totes les seves esglesioles, des de sempre.