Con el mayor de los respetos…
Cuando era pequeño (lo fui en su momento) un Tío mío, solía decirme que tuviera cuidado con lo que hiciese porque había un ojo que todo lo veía. Desde entonces, yo incrédulo de mi, hasta para quitarle un cigarrillo a mi Padre, lo hacía debajo de una sabana incluso de noche.
Todo fue bien hasta que un día, mi Madre, se levantó a tomar un poco de agua y se encontró con un fantasma en el comedor. Su reacción fue valiente. Cogió la escoba y me corrió por la casa a escobazo limpio.
No sé bien qué relación tiene la frase con la fotografía. Pero lo que me vino a la cabeza cuando vi acercarse a esta señora, fueron las palabras de mi Tío… “el ojo que todo lo ve”.
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Es que t'imagina amb el llençol al cap i no puc parar de riure...
ResponderEliminarLa meva mare enlloc de la granera agafava l'espardenya, però mai em va agafar...jo corria més...
;)
Una foto ens pot portar tants records...
Crec que l'art de la fotografia és el màxim, activa la memòria i els sentiments es posen en marxa...
Abraçades Jan.
Se ve que fuiste inquiero y el que tuvo retuvo, buen relato amigo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es increïble com una imatge ens pot remoure el "disc dur" que tenim al cervell fins trobar el lligam amb el que estem veient.
ResponderEliminarUna abraçada
Que una imagen te convoque estos recuerdos la hace mas maravillosa.
ResponderEliminar;) qué ironía...la señora está obligada a ver todo bien por ese sólo ojo (pero esto es bastante "elegante" para los parches que tuve que usar yo por una afección ocular desde muy niña)...
ResponderEliminarEres rápido con tus recuerdos y la imaginación,Jan!
Abrazos grandes.
A mi me parece que tiene cara de pocos amigos. Seguro que no pensó que
ResponderEliminarla foto iba de veras, porque de lo contrario, igual la veo capaz de denunciarte,jajajaja !!!.
Por cierto, nunca has tenido problemas en este sentido Jan? Pienso que muchas de las fotos que publicas, por aquí serian difíciles de tomar,así sin mas, a cuerpo gentil.
saludos cariñosos, desde la dolida i arrruinada Catalunya.
He estado echando una ojeada a tu blog, y seguiré pasándome por aquí.
ResponderEliminarEn cuanto a esta entrada te diré que me lo he pasado bien leyéndote.
Reflejas bien esos miedos infantiles y la foto... buenísima.
Un saludo.
jajajaja me ha hecho reir mucho tu anécdota de la sábana!
ResponderEliminar=)
Algo de aquella inocencia se siente aún latiendo detrás del disparador de tu cámara!
=)
Pues a mi me dijeron que las madres lo ven todo, eso si me lo dijo mi madre. Saludos.
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