No puedo dejar de pensar en hacerme un autorretrato. Rembrandt se pintó más de ochenta. Egon Schiele deformaba sus autorretratos hasta límites insospechados. Bacon tenía su peculiar técnica para conseguir lo deseado. Van Gogh pinto veintisiete autorretratos.
Yo, que solo se pintar montañas en servilletas de papel, aun no tengo ninguno. Deberé de recurrir a la fotografía, como mi amigo Xuan Rata. -Clica aquí para ver el suyo- Se perfecciona a si mismo. Yo sigo ausente en mi propio encargo. Camino disperso. Busco un espejo, un charco de agua, algo donde se refleje mi estampa. Mi triste figura. Ningún cromado. Ninguna olla de aluminio. Nada donde reflejar mi camino.
Termino el día cansado. Me siento en las escaleras del viejo convento. Hoy me acogen, dándome posada y sustento. También espero escuchar los maitines a las cinco de la madrugada. El canto gregoriano me sienta bien.
Entre tanta paz, silencio y equilibrio me siento acompañado. Me giro y me veo. Copiado en una de las figuras que el tiempo ha castigado con un desgaste desmesurado de su rostro. Me siento identificado. Me fotografío a mi mismo...
"Anécdotas"
Copyright © By Jan Puerta 2008
Texto y fotografías con copyride del autor.
Te encuentro favorecido pero un poco ensimismado. Es normal. Ciego, sin olfato y con las palabras mudas. Solo el pabellón auditivo parece que se mantenga recio. Que las piedras oyen es algo bien sabido. Y por cierto, a tú edad,¡qué envidia de pelambrera!
ResponderEliminarEntre tu autorretrato y tú solo hay una pequeña diferencia: el envejece más despacio.
Creo que te dejaste llevar un poco "demasiado" por lo cantos gregorianos.
ResponderEliminarNo puede ser tu autorretrato.
Las piedras por más hermosura que reflejen en su superficie bañada de tiempo, no tienen algo que tenemos los comunes mortales que no logramos ver siglos: un alma que asoma desde nuestros ojos y que regala presencia y razones, a nuestra efímera existencia.
Buenas mañanas Jan.
para qué un autorretrato, cuando uno sabe pintar montañas en servilletas de papel... mucho mas bonito
ResponderEliminarpreciosa la foto
un abrazo
Tal vez fuese un antepasado tuyo, seria bueno investigar.
ResponderEliminarBuena foto.
Un saludo.
Me pregunto que tipo de autoretrato te harías tras una temporadita en Egipto...
ResponderEliminar¿Sin narices tambien...?
;-)
Buen fin de semana!
interesante....te invito a que te pases por mi otro blog, para ver la última entrada, es de autorretratos jajaja
ResponderEliminarbesiños
Xuan…
ResponderEliminarEl tiempo no perdona. A pesar de ello, son un testigo mudo de lo que acontece. Un invitado de piedra. Lo de la pelambrera es solo un detalle entre el rock y el hipismo que uno aun lleva dentro.
Gran diferencia la de envejecer despacio o ser absorbido por el.
Un abrazo amigo.
Gizela…
ResponderEliminarUna piedra, digamos que tiene un alma diferente. No rara, sino diferente. La piedra más antigua del planeta tiene su esencia. La esencia es la simbiosis del alma y sus circunstancias. Al menos eso creo. O imagino.
Recuerdo que en colegio me enseñaros que éramos personas, animales o cosas. Siempre me ha gustado ser una cosa.
Un abrazo y un feliz día amiga.
Anitta…
ResponderEliminarMe voy a buscar un viejo café, donde la servilleta absorba mejor el fluir de la tinta.
Un abrazo
Abe…
ResponderEliminarPues no se. En ocasiones he pensado que cuando uno se siente identificado con algo por alguna razón debe de ser.
Un abrazo
Gabiprog…
ResponderEliminarQuizás la de un grano de arena. Me identifico con el movimiento de las dunas.
Habré sido uno de ellos en otra vida?
Un abrazo
Carmensabes…
ResponderEliminarA ver si me paso y me autorretrato allí también.
Un abrazo
Jan!
ResponderEliminarComparto contigo eso de si uno se identifica con algo, por algo es; creo que tiene relación con los símbolos personales, esos que (per)seguimos, que elegimos (a veces sin entender bien el porqué) y que solo tienen significado para nosotros (pues de alguna forma le reconocemos algo nuestro).
Como siempre, más allá de las imágenes (la del post anterior es fantástica), tus escritos son algo muy placentero de leer!!
Un beso grande!
Yo creo que si juntamos todas tus entradas e imágenes de este blog, llegaríamos a darle a ese rostro de piedra una mirada, una sensación de vida.
ResponderEliminarQuizás esa sensación que no tiene este autorretrato es lo añore aqui, pero tus palabras me la dan, se nota bien que estas vivo y que serias capaz de romper ese rostro de piedra por sonreír para expresar algo de alegría.
Saludos.
Dg…
ResponderEliminarLos símbolos son como esa mano invisible que nos ayuda a caminar sin darnos cuenta. Por eso me dejo llevar por ellos. Cuando aparecen, bienvenidos sean.
Un abrazo
r.rivero…
ResponderEliminarAlguna que otra vida debió de tener en su día el susodicho rostro. Al menos el artista que la esculpió a golpe de cincel, tenía esa idea. Supongo.
Gracias por darle ese sentido a mis entradas.
Un abrazo
Hola Jan.
ResponderEliminarHace días que no pasaba por aquí. Siempre es un placer entrar...y justo ahora con tu autoretrato
Ainss !si las piedras pudieran hablar!
Un saludo y hasta pronto
pues pequeña decepcion, te suponia mas joven, un par de años menos o tres incluso, quizá un lustro. aunque no me das la sensacion de quietud que desprende el machote de la foto más bien me sugieres todo lo contrario, pareces un tipo viajado y cultivado, creo que como rembrandt debes continuar tus retratos, por aquí tenemos paciencia :) saludos
ResponderEliminarMi hermano, ahora si no entendi nada jejeje
ResponderEliminarPero aqui estoy intentando resolver el misterio de esta entrada.
Saludos y un abrazotototote
Pues yo a mis interpretaciones, como siempre. Creo que si nos encontramos perdidos, en el momento mas inesperado, cuando parece que no sabemos seguir el camino, nos encontramos a nosotros mismo. Felicidades por haberte encontrado, y por conservarte tan bien! Jejeeje!
ResponderEliminarUn saludo!
Extraxtos…
ResponderEliminarMejor que no hablen. No vaya a ser que cuenten lo que no deben.
Un abrazo
Ripley…
ResponderEliminarLo de la edad siempre es relativo. Mi otro pétreo, le gusta su rincón y ver las gentes pasar deambulando por el patio de la “escola Massana” de Barcelona.
En mi caso amigo, soy un culo de mal asiento según palabras de mi Madre. Y ella, me conocía como si me hubiera parido.
Seguiré intentando retratar…
Un abrazo.
Guillermo…
ResponderEliminarMe has arrancado una sonrisa con tus palabras. No hay misterio. Pero si te soy sincero, yo tampoco me entiendo a veces. Es una metáfora sobre los autorretratos. Tu espontaneidad me encanta.
Un fuerte abrazo amigo.
August…
ResponderEliminarA veces nos encontramos para perdernos a continuación. Me conservo como un viejo roble… pétreo.
Un fuerte abrazo amigo
se me olvidó decirte que tienes algo para ti en mi blog. Espero te guste.
ResponderEliminarMuy bueno poseidón! yo no me he atrevido a hacerme nungún autoretrato, puede que se estropeara la cámara jajajajaja.
ResponderEliminarSaludos, y como siempre sigue escribiendo así que me encanta leer tus post.
Es un autoretrato muy original, aunque el tiempo haya castigado con un desgaste desmesurado tu rostro, tu interior sigue ganando mucho !!!
ResponderEliminarAbrazos
August… Gracias.
ResponderEliminarUn abrazo
Carolina…
ResponderEliminarInténtalo. Las cámaras resisten lo indecible.
Un abrazo
William…
ResponderEliminarDicen que de un retrato uno si se fija bien, puede adivinar su alma.
Un fuerte abrazo amigo.
excelente. texto y fotografía se juegan de manera especular. muy bueno... me ha gustado mucho tu blog y me alegra haberlo encontrado. saludos, h
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