“Dos dedos por ventura”
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Los jueves leemos el Quijote con Don Pedro Ojeda
Cap. 2.39
No obstante, veo que Sancho, cada vez esta mas envalentonado. Se atreve con todo. Primero duda de la muerte de la reina Maguncia. Y lo hace con su estilo. Incluso es capaz de desarrollar una teoría donde el desmayo pudiera ser lo acontecido a la reina. Y así la defiende para el deleite de la condesa y la desesperación de Don Quijote, quien parece ajeno a todo, aunque tiene la mosca tras la oreja.
Cervantes nos prepara para un gran acontecimiento. Tantos personajes encantados, tanta ceremonia llena de alabanzas para el caballero manchego tiene que tener un punto culminante que imagino empezaremos a ver en el próximo capítulo.
La imagen corresponde a un extraordinario trabajo en cobre repujado. Don Ricardo Méndez Morales, un autentico artista del bronce repujado, realizó este trabajo y otros que veréis en próximas sesiones por encargo de Don Sebastián Tapia. Un personaje muy quijotesco como veremos en otro capítulo. Como dato anecdótico, cabe destacar que Don Sebastián tiene una finca a la cual bautizó como “El Toboso”.
La imagen corresponde al salón de su casa, donde una imponente chimenea central, está presidida por una campana de bronce donde esta nuestro personaje rindiendo pleitesía a quienes lo contemplamos y seguimos.
Grabados e imágenes de ediciones antiguas.
Siguiendo la estela de los ojos llenos de locura que la semana pasada quería destacar en el dibujo de Don Quijote, hoy, os presento a Sancho y Dulcinea. Dos extraordinarios trabajos de una edición inglesa de 1833.
Clic en las imágenes para verlas mejor
“Quijote”
Copyright© By Jan Puerta 2009
Texto y fotografías con copyright del autor
janpuerta@gmail.com
Me ha gustado el detalle de la bota de vino... Besotes, M.
ResponderEliminarGracias por hacer tan cercana nuestra literatura más valiosa. Un lujo venir y aprender.
ResponderEliminarHasta pronto.
¡Si, SANCHO cada vez está más seguro de sí mismo!
ResponderEliminarIncreible las imagenes quijotescas que encuentras y los lugares, como esa Finca. Dime, ¿tienes acaso, algún antepasado Tehuelche, experot rastreador que te legó sus genes?
Abrazo y buen fin de semana.
Veo que poco a poco vuelves a la normalidad y eso me alegra enormemente. Como siempre deleitándonos con estas entradas Quijotescas. Excelente.
ResponderEliminarun fuerte abrazo
En efecto, querido Jan, a este Sancho no hay quien lo pare (por ahora). Excelente el trabajo en cobre.
ResponderEliminarY gracias por tu entrada, que en las presentes circunstancias es doblemente valiosa.
Buenos días, Jan Puerta:
ResponderEliminar¡Cuántos admiradores nuestro caballero Don Quijote a lo largo y ancho del mundo!.
¡Qué curioso detalle de la bota de vino colgada al lado del repujado en cobre que forra la chimenea!.
¡Cuántas coincidencias!. En Burgos, había un conocido guarnicionero -de apellido igual al dueño de la hacienda que citas- que hacía botas como la de tu fotografía. Hace años, mi padre, en sus viajes a Barcelona, las traía -a veces- como regalo para los amigos, que la habían visto en nuestra casa. Llevaban un dibujo alusivo a mi Ciudad.
Saludos. Gelu
P.D.: Estupendas las ilustraciones de Sancho y Dulcinea de la edición inglesa de 1833.
Privatizo mi blog, amigo, a partir de la semana que viene solo será visible por invitación. Si lo deseas, te enviaré una a tu email, ok?
ResponderEliminarUn abrazo!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarTantos prolegómenos sólo nos pueden llevar a una gran aventura, que ya se adivina con la aparición del gigante montado en un caballo de madera.
ResponderEliminarEl rayo de luz que incide en un Rocinante alicaído es una llamada al pueblo de Chile para que se levante y supere los terribles contratiempos del escaso minuto de temblor.
Estos ingleses nos interpretan así, como Sancho relamiéndose después de darle un buen choque a la bota. Dulcinea con poderío.
A mi también me ha llamado la atención la bota. ¿Será en honor de Sancho?
ResponderEliminarAquí en Pamplona hay gran tradición de fabricación de botas: Las Tres ZZZ y San Fermin.
Un abrazo
Muy buena aportación de imágenes como es costunbre en ti. Sancho está suspicaz y no es para menos, hay demasiada fantasía en torno a los duques.
ResponderEliminarEl gran Sancho, para mí, el verdadero "héroe" de esta maravillosa aventura.
ResponderEliminargeniales imágenes. Besos!!!
Me imagino tu estado anímico... Sancho es que no es tan burdo como nos lo han pintado hasta ahora...se ve con confianza y casi con poder... precioso el repujado. UN abrazo amigo.
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