Aun a riesgo de volverme pesado, sigo buscando un editor.
Uno de los perros callejeros más imperturbables con los que me he cruzado ha sido sin duda el de la fotografía. En varias ocasiones, pasé delante de él. Casi siempre, estaba en la misma posición. Descansando sobre una especie de alfombra persa. Una imitación acartonada que servia para descansar.
Pendiente de todo lo que sucedía a su alrededor. Los años vividos en esas condiciones trasforman los instintos y los hacen más receptivos en todos los sentidos. Un simple ruido anormal, hace que sus orejas lo capten para ser rápidamente analizado y procesado. Solo abriría los ojos en caso de que algo rompiera el estado armónico del rincón donde se encuentra.
Siempre le di una galleta. La dejaba en un rincón de su moqueta cenceña. Al mismo tiempo lo saludaba con mi clásico… “hola, don perro”.
Por unos instantes, nuestras miradas se volvían comunes. Poco después nuestros caminos volvían a ser divergentes. Nuestros pensamientos no. La vida, simplemente continuaba para ambos…
Siempre he preferido llamar don perro a un can antes que un nombre en concreto. Pero en este caso, siempre al ver su imagen en la fotografía, lo relaciono con “cartones”.
“Dogs of the World”
Copyright © By Jan Puerta 2008
Texto y fotografías con copyride del autor.
janpuerta@gmail.com
Nuestro amigo "Cartones" parece encontrarse en ese punto de su vida en el que ya no necesita abrir los ojos para ver y en el que podría, si quisiera, disertar sobre la calidad y calidez de las distintas clases de cartón. Son cosas (ambas) que se aprenden en la calle.
ResponderEliminarAquí en Cádiz es famoso un perro llamado Canelo. Murío hace tiempo y se le dedicó una calle, con escultura y todo. Se paso casi cinco años esperando a su dueño en la puerta del hospital. El dueño ingresó y murío. El perro esperó, en el mismo sitio, imperturbable.
ResponderEliminarConsiguió sobrevivir por el cariño de todos los ciudadanos que le cuidaron.
Cartones se le parece
Un abrazo Jan, sigo mirando y leyendo, aunque no siempre te deje un comentario.
Precioso que te fijases en "cartones", que aunque da un poco de penilla también se le ve muy agusto ahí descansando.
ResponderEliminarY preciosa la historia del amigo extractos.
Un saludo Jan.
Señores editores por favor, anímense que calidad hay para parar un barco. :)
seguro que seria un compañero de viajes perfecto ,
ResponderEliminarla palabra "fragile" del carton donde reposa no va con el el ....
dogs of the world, me va a gustar mucho seguir viendo mas entregas, seguro
abrazos
El cartón lo utilizan como aislante de la humedad, no del frío. También lo hacen aquellos que tienenla desgracia de dormir en la calle. También hay deportistas de la nieve (sky, snow,e tc) que lo usan como plantilla en sus zapatos. Inteligente perro, precioso can, y magnífico reportaje. Por cierto, es precioso Don Perro.
ResponderEliminarObservando la vida..
ResponderEliminarSin inmutarse..sin agobios ..en plena tranquilidad..como si nadie le pudiera perturbar
Una nueva mirada
me gusta!!
un café..en el Balcón?
Xuan…
ResponderEliminarLa universidad de la vida. Inmensa para conocer las sensaciones que uno puede encontrarse en cualquier momento de su existencia.
Los perros abandonados, tienen el instinto de la supervivencia mucho mas acuciados que cualquier ser humano. Cartones tiene en su vida aquella famosa frase que se suele decir… “cuando tú vas, yo ya he vuelto”.
Un abrazo amigo.
Neurotransmisores…
ResponderEliminarLa dureza de su cotidianidad, los hacen supervivientes en su entorno.
Como las personas.
Un abrazo
Sería un buen libro , yo como soy muy poco natural fotografiando intervendría variando el punto de vista de la toma a un nivel más bajo y evitando en el encuadre la interferencia de verticales y horizontales en distorsión y tratando el tono e iluminación de las diferentes zonas según donde queramos dirigir la mirada del espectador, pues con todo este rollazo que te acabo de soltar (perdón de nuevo) creo que la foto adquiriría dramatismo narrativo.
ResponderEliminarExtractos… No te preocupes por comentar…
ResponderEliminarDesconocía la historia de Canelo. Realmente increíble la actitud de lealtad de Canelo. Viajando he podido encontrarme con algún que otro caso parecido. Hace casi un año escribí un artículo en referencia a un perro al que llamaban “noble” que encontré en un cementerio. Cada día se acercaba hasta la tumba de la señora María. Con quien compartió vida durante siete años. Una historia que un día de estos publicare aquí. Tu comentario me ha traído a la memoria su historia.
Ya ves… pocos comentarios pero oportunos. Que más se puede pedir.
Un fuerte abrazo
Akiar…
ResponderEliminarGracias por tu llamamiento “editoril”.
Excelente la aportación de extractos.
Un abrazo
Anitta…
ResponderEliminarTe aseguro que la palabra frágil es un elemento a tener en cuenta en estos perros abandonados. Su fragilidad ante el ambiente que suele serles hostil es tal que no esta de más recordarlo desde ese punto de vista.
Espero que te sigan gustando las nuevas entradas. Aunque no siempre serán tan agradables de ver. La calle es muy dura.
Un fuerte abrazo amiga
Ercanito…
ResponderEliminarSon curiosas las diferentes utilidades que se les da al cartón. Algunos pintores en sus peores épocas, pintaban sobre ellos. La calle sigue siendo el máximo exponente en cuanto a reutilización de los muchos cartones que se usan a diario.
Gracias por tu aportación.
Un fuerte abrazo
Inkilina…
ResponderEliminarPero con la incertidumbre siempre por delante.
No hará frío para el café en el balcón?
Un abrazo
Tu frió??
ResponderEliminarEn mi nuevo espacio no hace frió
la brisa cálida de mi corazón te envolverá
Un café?
Osselin…
ResponderEliminarTomo nota.
Tienes razón en cuanto al efecto a conseguir. Algunas imágenes son de hace un tiempo. Si tener claro el proyecto. Otras que irán apareciendo, pude conseguir otra perspectiva mas “dramática”. Cuando fotografías a un perro de la calle, hay demasiadas interferencias. En ocasiones lo ves de lejos y puedes llegar y buscar el ángulo adecuado. Pero en ocasiones, me quedo con el encuadre y sin sin el perro. No digo que sea imposible, ni mejorable. En esta en concreto, busque esas líneas verticales del edificio como complemento a las líneas de su “alfombra”. Esa esquina que desaparece. Además me pareció muy oportuno el “frágil”.
En la postproducción, se podría conseguir parte de ese dramatismo sin duda. Pero suelo trabajar muy poco las imágenes. No por ganas, sino por falta de tiempo. Quizás si apareciese el editor, podría tener asegurado, aunque solo sea un poco la parte retribuida lo que me daría el tiempo necesario para ello. (Yo a la que puedo, pido)
No obstante, hay imágenes que irán saliendo que están llenas de dramatismo. Pero las iré publicando después de las fiestas.
Un fuerte abrazo
Inkilina...
ResponderEliminarLo del frío solo era una escusa para pasar dentro.
Un abrazo
En la cornisa tenemos una vistas espectaculares
ResponderEliminarla Luna como única espectadora
Un café?
Un perro que sabe tomarse la vida con relax. Casi todos los perros y animales en general, excdepto el hombre, que se desquicia tantas veces, buscan el relax en cuanto pueden...
ResponderEliminarSe ve muy agusto en esa postura, pero seguro que este animal a padecido lo suyo.
ResponderEliminarSeguo que seria un amigo inseparable para cualquiera.
Un saludo.
Nada vanidoso Don Cartones. Ni siquiera mira a la cámara.
ResponderEliminarMe ha caído bien. Si le vuelves a ver dale otra galleta de mi parte.
Amigo Jan:
ResponderEliminarTu producción en calidad y cantidad no me da respiro ;-)
Tiene "Cartones" una mirada mansa y reposa de las tribulaciones de su pasado.
Un abrazo.
Antón.
Gracias por tu atenta contestación. Comprendo que un viajero debe tomar la imagen que puede en cada momento. Con respecto a no perder el tiempo trabajando gratis tienes mucha razón y creo que haces muy bien en priorizar.
ResponderEliminarVerás, a mi retocar una foto como yo quiero me suele llevar unas tres horas (por foto!) y muchas veces acabo tirándola a la papelera de reciclaje. Así que hay que priorizar desde luego.
Por otro lado yo siempre estoy trabajando gratis para todo el mundo (no tengo remedio ja ja!), supongo que tener las habichuelas garantizadas por mi trabajo habitual ayuda a actuar así.
Resumen, sabes lo que quieres y eso es muy bueno Jan. Cuantas menos horas frente a la caja tonta mejor.
Espero que encuentres pronto un editor porque es muy bueno lo que haces.
ResponderEliminarA mí no hay cosa que me produzca más indefensión que un perro callejero. Y si encima me sigue... uf.
Saludos.
Querido Jan, ya te he respondido el email realizandote una propuesta. De paso te deseo una feliz navidad y prospero proximo año!!! Un abrazo enorme!!!
ResponderEliminarAriel.
Espero que tengas suerte con el editor, estaría fantástico tener un libro tuyo, pero eso si con firma incluida de puño y letra.
ResponderEliminarUn perro noble, espero que todos los que se le acercaran lo hicieran con la misma voluntad que la tuya, por desgracia no siempre es a si Jan.
Besotes.
Su reposo denota atención.
ResponderEliminarDormitando que no absorto.
Y que dignidad tan enorme tiene .
ResponderEliminarSubido ahí, con los ojitos así cerrados... da por pensar si en el fondo no pensará que es una especie de ¿Aladino?. Quizás él sienta su cartón como una alfombra voladora. ¡ Quien sabe!
^_^
Es curioso: los perros callejeros suelen ser gente tranquila y estoica. El cinismo lo dejan para nosotros.
ResponderEliminarLos editores, si no aparecen, no tienen alma.
Precioso perro, preciosa foto y preciosa historia.
ResponderEliminarDon perro vive ahí, sabe que vive ahí y no extraña nada. Por suerte, debe de haber muchos como tú, porque no se le ve delgado, y porque está tranquilo, confiado, controlando su pequeño mundo.
Los perros callejeros son listos, supervivientes, pueden llegar a vivir muchos años en su barrio. Los perros abandonados no, están desorientados y son carne de cañón.
En el fondo no difieren tanto de nosotros.
Enhorabuena por la imagen!
Y gracias por la visita!
Un abrazo.
Gostei do vi e do que li!
ResponderEliminar• Me encanta esta serie Jan
ResponderEliminarSiempre he tenido perros, hasta hace algunos años en los que ya mi tiempo no me lo permitia, con lo cual hemos decidido por unanimidad en casa, que para no cuidarlos, mejor no tenerlos. Uno de los que tuve Kiper,fue el mejor de todos, un pastor aleman muy parecido a este, yo creo que aquel perro nos entendia. Me dá mucha pena verlos así, me gusta el tributo que les rindes, los haces protagonistas y nos acercas a una realidad que muy poca gente vé. El mejor amigo del hombre es abandonado precisamente por su mejor amigo, el hombre.
ResponderEliminarBiquiños
Jan, ese serie promete...y mucho! Me encantará seguirlo.
ResponderEliminarCartón se parece mucho a la "Linda" que perdí yo, va a ser un año...La echo de menos..., ¡mucho! Una fotografía con ella fue una de mis primeras entradas al blog... ¡Casi que hablaba!
Gracias Amigo...Sigo tus pasos.
Un petonet, Ilona
Vaya perro bonito, y hay los que se gastan un pastón para que su perro tenga apellidos, cuanta gente tonta por el mundo.
ResponderEliminarUn saludo