.-Que hay jefe, descansando?
.-Pues si ya ve. Echando un pitillo.
Con gesto decidido sacó su paquete de cigarros sin filtro y le ofreció uno…
.-Gusta?
.-Pues no le voy a decir que no.
.-Y viene de lejos?
.-Mas o menos. Aunque mas que menos.
.-Ah… Se le ve con cansancio acumulado.
.-Pues si amigo. Son los años.
.-Que me va a contar a mí. Antes era un bidón de petróleo. Todos me respetaban, hasta que me fallo la salud y tuve una perdida por un poro.
.-Y no se podía reparar?
.-Costaba más la reparación que uno nuevo. Fabricado en China por tres euros la docena.
.-No me hable de los chinos que me enciendo. Mi jefe ya esta harto de ponerme aceite y grasa. Esta pensando en comprarse un modelo chino que lleva hasta radio incorporada!
.-Mal le veo amigo.
.-Mal nos vemos.
Siguieron fumando mientras transcurría la mañana. Bajo una calma aparente. En un pequeño pueblo, donde nunca sucedia nada extraordinario para ser contado.
“Microrrelato"
En la segunda parte aparece en escena un balón desinchado!
ResponderEliminar:-D
Parece que los dos pierden aceite, pero mientras puedan compartir un cigarrilo estarán más vivos que todos sus replicantes chinos.
ResponderEliminarPor cierto, ese bidón tiene un gesto de lo más humanizado: será cosa de esa melancolía propia del abandono.
jajaja ójala y mantengas tan viva siempre esa imaginación como hasta ahora amigo. Muy muy divertido diálogo. Me encanta jeje. Saludos!
ResponderEliminarLos objetos nos hablan, por descontado... pero no todo el mundo los sabe escuchar como tú.
ResponderEliminarun abrazo
Y mira hasta donde nos han llevado los chinitos, entre broma y broma se aproxima un 2009 bastante difícil.
ResponderEliminarSaludos
Jc
Hola, Jan. Hoy día, hasta lo nuevo se hace antiguo demasiado deprisa. El capitalismo obliga a renovar el catálogo cada año, a veces en menos tiempo. Antes, los hijos podían heredar los relojes de los padres como un gran recuerdo de familia. Ahora las cosas ya no tienen vida ni historia, sólo son artefactos. Una pena. Excelente foto. Un abrazo.
ResponderEliminarUna historia con dos protagonistas especiales y una situación de fondo que genera inquietud.
ResponderEliminarTu imaginación y tu cámara son para premiar :-)
Un saludo.
Antón.
Imaginación, algo muy importante ;)
ResponderEliminarMuuuuacks!
Los dos polos de eso de la energía para moverse montado en algo.
ResponderEliminarEs que los chinos, pero no solo los chinos, han conseguido que nada sea perdurable. ¿Cuánto duraban antes los coches, los televisores, las lavadoras? Al principio de la era informática ¿cuánto nos duraba un ordenador antes de quedarse obsoleto?
ResponderEliminarMe gusta la foto, ilustra muy bien el relato, sobre todo el virado.
Saludos.
quizás parezcan imposibles a primera vista, pero si meditas un instante están casi al orden del día. hablamos y cada uno a lo suyo. Un saludo!
ResponderEliminarComento esta foto aunque he visto gran parte de las posteadas. Solo decirte que me ha gustado mucho acercarme a esa mirada tan personal, me encantan esos pequeños detalles que pocos ven y que has sabido capturar con maestría. Seguiré pasándome por aquí y aprendiendo. Un saludo.
ResponderEliminarPasar por tu blog es un contínuo reencontrar lo más puro de la esencia fotográfica.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué vida tan gris la de estos dos tipos. Creo que me voy a acercar a echar otro pitillo con ellos
ResponderEliminarUn saludo, Jan
A mí el gesto del bidón me recuerda a los personajes de la película animada Cars, ¡y no me preguntes por qué!
ResponderEliminarVeo que trabajas mucho la personificación en tus textos últimamente, lógico, a veces los personas de verdad damos poco de sí para que sea contado...
Saludos.
¡Qué bien Jan! Parece que seguimos en el mismo ambiente de otras veces.
ResponderEliminarEstupendo el diálogo. Y la foto (blanco y negro, ¡qué difícil hacerlas buenas!) con bidón y bici,, extra.
Un abrazo
En el fondo todos acabamos en un rincón, como trastos viejos. Sobre fondo de cal blanca.
ResponderEliminarComo siempre es un placer entrar en tu blog y disfrutar con la lectura de tus relatos.
ResponderEliminarBonita fotografia.
Un saludo.
Muy cretivo el diálogo y una imágen muy acertada.
ResponderEliminarGracias por visitar mis blogs.
Saludos
Mientras lei tu historia senti tristeza...imagine a dos viejitos en una plaza cualquiera en mi isla... sorry no soy tan letrada y filosofica como tus otros lectores...pero tu blog es magico no solo por tus letras tambien por las fotografias que muestras, asi que no pude resistir la tentacion de comentarte...
ResponderEliminarbesitos...
A saber lo que comentará cada trasto que tenemos en casa >_<
ResponderEliminarQué genial!!!!!
ResponderEliminarMuy ingenioso Jan , yo lo único agregaría es una advertencia : "Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia"
ResponderEliminarAbrazos
P.D.
Gracias por el consejo amigo
jajaja, gran imaginacion la que tiene ud amigo conservela y cuidela.
ResponderEliminarUn saludo
Danthe.
Preciosa foto e imaginativo texto que, paradójicamente, refleja una situación que no tiene nada de imaginaria. A este paso, terminaremos todos arrojados a un bidón, arruinados,y los chinos se pasearán en bicicleta por el resto del mundo, una vez conquistado tras esta guerra incruenta. En sus bicis, claro, esas que llevan radio incorporada.
ResponderEliminarBesos.
y pasará el tiempo y envejecerán los personajes, a lo mejor serán otros, pero se repetirá talvez el diálogo, como seguramente se repite a diario.
ResponderEliminarme gusta la composición, me gusta el entorno para la bicicleta,
un abrazo, Jan