"Recordar te hace despertar de tu realidad. Por mucho que te guste tu pasado siempre deberás volver al futuro que labraste justo en ese momento que has recordado".
Cuando uno estaba edad escolar había escuchado decir que hay rincones que uno ve y que jamás puede olvidar. De pequeño lo asociaba a la plaza que quedaba cerca del colegio donde solía jugar y entretenerme como todos los muchachos de mi edad. Mis viajes solían ser cortos. De casa al colegio y del colegio hasta casa. La televisión me ayudaba a soñar despierto en futuros grandes viajes. Aun recuerdo a un simpático personaje que aparecía cada tarde en la pequeña pantalla (por que entonces la pantalla era pequeña de narices) y que siempre solía iniciar sus frases con un… “por mis viajes por todo lo largo y ancho de este mundo” para ser cortado con grandes gestos casi inquisidores tanto por Locomotor, como por Valentina o el mismísimo Tío Aquiles. El personaje en cuestión se hacia llamar el capitán Tan.
Hoy al ver este árbol en mi carpeta de amaneceres personales he recordado muchos rincones que hoy, me gustaría volver a pisar. Fotografiarlos y hacerlos mas eternos si cabe. Ya que cuando mi recuerdo desaparezca por cuestiones de esa falsa longevidad que uno tiene, nadie recordara esos instantes que fueron tan especiales para mí.
Hoy al ver este árbol en mi carpeta de amaneceres personales he recordado muchos rincones que hoy, me gustaría volver a pisar. Fotografiarlos y hacerlos mas eternos si cabe. Ya que cuando mi recuerdo desaparezca por cuestiones de esa falsa longevidad que uno tiene, nadie recordara esos instantes que fueron tan especiales para mí.
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Copyright © By Jan Puerta 2008
Texto y fotografías con copyride del autor.
Precioso texto, es verdad, nadie recordará esos momentos tan especiales para uno, por eso haces bien en inmortalizarlos, lástima no haberlos atrapado todos en la infancia, nuestra etapa más bonita. Un abrazo!
ResponderEliminarOtra fotografía minimalista de las tuyas, Jan. Otra demostración de que con muy pocos elementos se puede conseguir una foto maravillosa, que nos lleva a la ensoñación aderezada con tu texto.
ResponderEliminarEs muy posible que, cuando nos quedemos calvos total, nadie recuerde nuestros instantes especiales. Quizás porque, lo que tienen de especial, lo guardamos muy dentro de nosotros mismos. Forman parte de nuestras vivencias más íntimas. Sin embargo, yo creo que sí habrá alguien que nos recuerde con cariño y nostalgia. Me resisto a creer que, una vez emprendido el Gran Viaje, seamos olvidados.
Además, en lo que a los instantes se refiere, quedan nuestras fotos. Algún día, en algún lugar, alguien las verá y pensará:
"Éste debió ser un instante especial para el autor". ¿No crees?
Un fuerte abrazo.
Imposible no deternerse en esta foto, ni en ese arbol. Dan ganas de sentarse en su compañía a la espera de ver amanecer
ResponderEliminarEre mi ídolo… él y los hermanos Malasombra, que eran malos de verdad.
ResponderEliminarQue recuerdos nos traes con tu entrada de hoy, recuerdos en blanco y negro...la foto del arbol me encanta¡¡¡
ResponderEliminarBuenos días, Jan Puerta:
ResponderEliminarEsta fotografía de hoy me ha encantado. ¡Qué árbol más precioso!. Y ¡qué tronco tan extraño!. ¿Existe de veras?.
Pero... parece que durante la noche ha llorado su soledad.
Saludos. Gelu
El àrbol aleja la amenaza de la soledad: buena sombra le cobija, quien a gran àrbol se arrima (creo que lo dije al revés jaja).
ResponderEliminarTendría yo de 6 a 8 años cuando Locomotoro y Valentina,UF!!, yo no sé tú, pero yo me estoy haciendo viejo.
Voy a ver que tienes ahí "pabajo"
Lo malo, querido amigo, es cuando vuelves a ellos y ya no existen.
ResponderEliminarEste post es entrañable... a mi tambien me gustaria.
ResponderEliminarMucho.
Puede que ya no existan, como dice Pedro: pero siempre viviran en nuestro recuerdo y en nuestro corazón.
Un abrazo...!
Soñar con volver a los lugares que para nosotros fueron especiales... Yo también los tengo y a algunos he vuelto y nunca me han decepcionado a pesar de los cambios, pero lo que más me llama la atención es que vuelvo a revivir los olores. Todo lugar tiene una imagen y también un aroma especial.
ResponderEliminarMe encanta la imagen y sobre todo el pequeño charco que parece velar la soledad del árbol, como un compañero.
Besucos.
Realmente creo que eres de los afortunados en cuanto a recuerdos. Tus imágenes te ayudan a atesorarlos y conservarlos como se merecen.
ResponderEliminarun abrazo!
No puedo evitar sentir nostalgia leyendo tu Texto, viendo este árbol solitario, Jan..
ResponderEliminarHe venido a ver amanecer en tu compañia y en la de tod@s...
Un beso.
uffffffffffff! esta entrada tuya hoy me ha dejado muy reflexiva, pero mucho, me ha dado un escalofriooooo, tu imagen...¡genial!
ResponderEliminarUn abrazote
Un lugar para recordar... a menudo pasa que cuando volvemos, ya nada es lo que era.
ResponderEliminarEntrañable recuerdo de los "chiripitiflaúticos". Un personaje de aquella inolvidable serie, te lee a menudo. Tampoco es ya ese recuerdo, ahora ya solo es persona.
Un abrazo enorme!
Jam...Muchas veces mejor,quedarse con el recuerdo...quizas,un importante edificio ocupe su lugar...ahora vivimos rodeados de moles de cemento.Tu escrito me hizo sentir tristeza...y a la vez me lleno de gratos recuerdos;me llevo a mi niñez.Gracias.Besitos Silvi.
ResponderEliminarHola!!!!!!!
ResponderEliminarHacia un tiempito que no pasaba por aquí, elegí el 05/09/09, porque me gusto y porque además fue el día de mi cumpleaños, jijijiji.
Un abrazo de oso.
Majestuoso árbol. Lo primero que se me viene a la mente es el refrán que dice: "Quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija"
ResponderEliminarNuestros recuerdos tienen que ser compartidos para que realmente resistan nuestro ocaso y desparición, en cierta medida necesitamos de cómplices y es una pasada encontrar gente dispuesta a serlo.