Bienvenidos

Cada día del año se publica una nueva entrada en este espacio. ¡Gracias! por vuestra presencia!

martes, 2 de marzo de 2010

Ya no se construye como antes... desgraciadamente.

Terremoto de Chile III parte
En todas las tragedias provocadas por la naturaleza, hasta pasados unos cuantos días, uno no sabe la magnitud del daño recibido en una propiedad. A veces, unas cuantas grietas son fácilmente solucionables. En otras ocasiones, los daños estructurales son tan grandes que no queda otro remedio que la demolición.
La casa que ilustra esta entrada, tiene más de ciento cincuenta años. Es toda una institución. Aguantó los grandes terremotos chilenos sin otros desperfectos que pequeños desprendimientos sin mucha importancia. La madrugada del viernes al sábado pasado, la intensidad del seísmo y su duración fueron su sentencia de muerte.
Afortunadamente, no hubo desgracias personales. Pertenece a la familia Eastman. Los tres hermanos, que fueron sus últimos inquilinos fallecieron hace años. No creo, por lo que me han contado que hubiesen podido soportar en vida, el ver su casa en este lamentable estado. La querían demasiado.
Hace unos meses, se restauró con el propósito de ser vendida. El cartel, sigue indicando la operación que nunca se realizara. Paradojas del destino. No creo que nadie quiera comprar y pagar por un inmueble que será derruido con toda seguridad.
Esta introducción sobre una casa centenaria, me sirve para reflexionar sobre esos constructores sin escrúpulos que han alzado edificaciones en pleno siglo XXI totalmente endebles ante un terremoto. No entiendo cómo han podido ser tan miserables en escatimar la calidad de los materiales. Todo para meterse en sus bolsillos, unos cuantos millones de pesos. Hay familias que han pagado su ilusión de tener un piso, con su vida, debido a esa falta de escrúpulos. Esto me recuerda a los años setenta en España. Donde más de una tragedia terminó con la vida de diferentes trabajadores pos causas parecida. O la famosa aluminosis que dejo a cientos de propietarios sin su vivienda.
Es inaudito en un país como Chile, donde los terremotos no sorprenden a nadie, se siga construyendo con tanta deficiencia. En los próximos días se sabrán mas datos en referencia a estos personajes que tanto daño han causado por su ambición ilimitada. Desgraciadamente, quien maneja tanto dinero, maneja los mejores abogados. Y estos, en ocasiones se alían con el mismísimo diablo.




Como complemento os dejo dos curiosidades lingüísticas chilenas que he aprendido estos días…
En Chile se utilizan dos expresiones que me han gustado a pesar de que cuando se pronuncian, nada bueno se avecina. Una de ellas es “Trizada”. Imagino que la locución debe de venir de aquella expresión que se dice cuando algo se rompe en diferentes pedazos… “Se ha hecho trizas”. Y se aplica coloquialmente cuando una casa está llena de grietas… “La casa se ha trizado”
La segunda expresión es estar “terremoteada”. Se utiliza básicamente para definir el daño que ha recibido uno en casa. “Tengo la casa terremoteada”. “Estoy terremoteada, se ha roto los cristales y otras cosas”.

A pesar de que mi entorno aun es caótico, tengo la intención de seguir con las entradas habituales. No obstante si hay algo que no digan los demás, aquí estaré para contarlo. Hay mucho por hacer y espero poder participar de ello.
De nuevo os agradezco las muestras de cariño y apoyo que me estáis ofreciendo. De todo corazón os agradezco vuestros gestos y esa solidaridad que tenéis con el pueblo chileno que tan bien me acogió cuando llegué aquí. Gracias en su nombre ye en el mío propio.
Por cierto, disculparme si no puedo entrar en vuestros espacios y no comento. Disculparme si no os contesto aun vuestros correos. Lo haré. Palabrita de niño bueno.


Las imágenes de este blog están subidas a una resolución de 1024.
Con un clic sobre la imagen las veréis a pantalla completa.

Clicar aquí para ver la serie completa:
“Anécdotas”

Copyright © By Jan Puerta 2008
Texto y fotografías con copyride del autor.
janpuerta@gmail.com

21 comentarios:

  1. Tienes mucha razón en la construcción desalmada que ha ocurrido en estos últimos años. Lástima que esa casa centenaria será demolida pero menos mal que sus dueños no están aquí para verlo.
    Me han gustado mucho eso de "trizada" y "terremoteada". Palabras muy descriptivas. Muchos besotes, M.

    ResponderEliminar
  2. Ese aspecto de las deficiencias en las nuevas construcciones es gravísimo, sobre todo si se llega a comprobar que ha habido estafas o abaratamiento en las estructuras supuestamente antisísmicas, sobre todo en puentes, rutas y edificios importantes. Supongo que ya habrá tiempo para esas investigaciones.-

    Me alegro que estés normalizando tus publicaciones.
    un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. BON DIA JAN:

    Algunos constructotres sólo van a la "pela, como decimos los catalanes.
    En casa tengo un libro que se llama XILE AL COR, ayer lo cogí y lo apreté contra mi corazón.
    Aunque sea una tontería fue un reflejo lleno de sentimiento que se me ocurrió.

    Una abraçada de soliraritat.Desde Valencia.Montserrat LLagostera

    ResponderEliminar
  4. deficiencias estructurales, escamoteo en materiales, estafa,...y como consecuencia se pierden vidas humanas.
    No se porqué son palabras que cada vez suenan cuando hablamos de nosotros mismos.
    Saludos y ánimos

    ResponderEliminar
  5. En el sur de España, más concretamente en Granada, también son frecuentes los terremotos, aunque llevamos unos veinticinco años que no suelen ser de gran importancia, los ha habido bastante dañinos; de hecho hay un pueblo cuyo nombre, Albolote, significa algo así como ciudad sepultada y vuelta a construir. Yo misma viví hace años varios seísmos que prefiero no recordar. Como tú bien dices, me pregunto cómo es posible que no hay una normativa seria e inquebrantable para construir como es debido en lugares donde los terremotos son una amenaza y una cuestión de tiempo. Que ocurra una catástrofe en Granada es bastante probable, la normativa en construcción es escasa o no se cumple.
    Mis mejores deseos para el pueblo chileno.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Querido Jan: la construcción, en todos los lugares, es sinónimo de corruptela.

    ResponderEliminar
  7. La casa, una tragedia más en este caos que deja tras de sí un acontecimiento de esta índole. änimo!

    ResponderEliminar
  8. Hasta en eso estamos yendo a mal o a peor; hasta en la construcción se ha introducido el virus de la incompetencia, amigo.

    Un abrazo...!

    ResponderEliminar
  9. Impresionante la imagen de la destrucción y fuerza de la naturaleza en esta casa.

    ResponderEliminar
  10. Las deficiencias en la construcción se deben al ansia del dinero fácil, de los beneficios enormes a costa de la calidad mínima de lo construido. Ésto siempre ha ocurrido, ocurre y ocurrirá. La corrupción no es privativa de los constructores. Los hay buenos, regulares y sinvergüenzas, como en todas las profesiones y oficios conocidos. Es la condición humana la que falla en estos casos.

    Permíteme un comentario sobre el tuyo acerca de los abogados. No seré yo quien afirme que no hay abogados que se alíen con el mismísimo diablo. Insisto en que, la corrupción no es privativa de una profesión en concreto.

    Sin embargo, no debemos olvidar que los sistemas judiciales de países desarrollados y democráticos se basan en que todo acusado tiene derecho a un juicio justo y una defensa adecuada. Hasta el asesino más abyecto tiene esos derechos. El abogado defensor tiene el derecho y, lo que es más, LA OBLIGACIÓN de defender a su cliente hasta las últimas consecuencias.

    Naturalmente, también existe la cláusula de conciencia. Pero éste es otro tema.

    Te deseo todo lo mejor, querido amigo y sabes que me tienes a tu disposición para todo lo que puedas necesitar.

    Un fuerte abrazo, Jan.

    ResponderEliminar
  11. Dinero, dinero y siempre dinero. ¿Qué condena deberían pagar constructores, empresarios, concejales, alcaldes...? Hasta allá arriba llegaríamos, seguro.
    Lamentable, desesperante, mezquino y rastrero.
    Pero todo éso lo entierran con palabras, sólo con palabras. Encima de cada persona y su sufrimiento...todo lo tapan con palabras. No entiendo cómo no nos inunda la revolución, no sé cual, pero alguna.
    Mientras espero ávido tus entradas, tus noticias y reflexiones.
    Fuerza.

    ResponderEliminar
  12. Amigo vivimos la era del "usar y tirar" hasta en las viviendas... antes se construía para las generaciones futuras, tanto en su estética como en su solidez. Hoy en día lo importante es que "el seguro decenal" cubra hasta las bombillas que se fundan...

    Y no te disculpes por no acudir a comentar y responder porque -a título personal- aunque disfruto muchísimo tus visitas a mis casas, lo que más me gusta es venir a la tuya y encontrarte en ella :)

    un abrazo, amigo mío

    ResponderEliminar
  13. Tremenda realidad. hoy por hoy la seguridad del ser humano se compra.
    Es "más rentable" construír mil pisos de baja calidad, que cien con buenos materiales. Triste, pero real.
    Y luego vienen a decirnos que todos tenemos derecho a una vivienda digna. ¡Indignante!
    Besos Jan!!!

    ResponderEliminar
  14. Muy gráficas las dos expresiones que resaltas.
    La construcción está corrupta en todas partes. Lo único que miran es su propio beneficio.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  15. los corruptos existen en todas partes amigo...

    No te preocupes por no comentar, ahora toca otra cosa... gracias por enseñarnos esta cara de la tragedia amigo.

    UN ABRAZO ENORME

    ResponderEliminar
  16. No se que debe ser mas angustioso si pasar la experiencia del terremoto o el despues ver como parte de la vida que has construido con los tuyos se demorona y solo quedan ruinas y la incerceza del que sera.
    Espero que pronten en lo mas basico se pueda volver a la normalidad, ahuque el resto seguro que costara mucho tiempo
    Te deseo todo lo mejor

    ResponderEliminar
  17. No pudo resistirlo, Jan, demasiados golpes había recibido.

    Aun así, fue una privilegiada, que le pregunten a las chabolas o casitas de papel que tanto abundan y que a la mínima se desploman como los naipes.

    Un abrazo para ti y mi corazón con Chile.

    ResponderEliminar
  18. Hola Jan me alegro saber que te encuentras bien.

    Un abrazo desde España
    el lio de Abi

    ResponderEliminar
  19. Lo malo es que de donde más dinero sacan las constructoras es de las viviendas más populares y siempre les toca a los mismos sufrir su avaricia.
    Cuídate Jan y ya sabes dónde nos tienes.
    Muchos cariños.

    ResponderEliminar
  20. A titulo de curiosidad te contaré que el mismo dia del terremoto, unas horas antes de que sucediese en Chile, hubo uno en Japon, 7,1 o 7,3 (algo que evidentemente ya sabrás) segun las informaciones que habia recibido, al momento me puse en contacto con familia que tengo alli, en Kyoto y Okinawa, los de Kyoto todo bien pero sin noticias de los de Okinawa, al cabo de unas horas me comunican que todos estan bien, sin novedad. Mi familiar residente en Kyoto, me habla de que en las noticias solamente hay aviso de tsunami pero que no hubo desgracias personales en okinawa, me resulta increible. Horas mas tarde me envia un mail comunicandome lo de Chile... tremendo, todas los medios de Japon informando de lo acontecido en Chile y en Japon aparentemente ni un rasguño... Está claro que la fuerza con la que se sacudió Chile ha sido tremenda, pero aún así te doy la razón, hay calidades y calidades, las construcciones modernas dejan cada vez mas que desear y las medidas a adoptar referente a las calidades de construccion malamente se cumplen.

    Te diré que hay pisos donde es posible oir el despertador del vecino de arriba, sentir el clic de encender y apagar las luces... grietas, balcones descuadrados, ventanas que no cierran, puertas retorcidas, suelos que se levantan... vergonzoso!!!

    Biquiños y cuidate mucho.

    ResponderEliminar
  21. Es muy triste ver q el esfuerzo de toda una vida por el techo propio se desvanezca x unos inescrupulosos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar

Apreciados amigos…
La gestión del tiempo es uno de mis problemas. En la medida de lo posible, contestaré vuestros comentarios.
Un abrazo