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martes, 6 de julio de 2010

Ausencias y silenciosos presagios


Una de las circunstancias que más me gusta del invierno austral es la soledad que uno puede vivir en una calle cualquiera. Solo hace falta un día gris y el consiguiente frio reinante, hace que todos se refugien en casa alrededor de una buena estufa mientras las calles se convierten en un paisaje de ausencias y silenciosos presagios.

Con un clic sobre la imagen las veréis a pantalla completa
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Copyright © By Jan Puerta 2009
Texto y fotografías con copyride del autor

8 comentarios:

  1. Hoy ha sido un día como el que muestra tu espectacular fotografía. En mi barrio hay calles solitarias como esa, quizás bordeadas por el ferrocarril. Una lluvia fina e intermitente, nubes bajas que achican mi micromundo...quizás el sonido de una radio por entre las rejas de una vieja casa...
    Agrandé la imagen, sentí que entraba en ella, olía la humedad de las hojas caídas y me fui caminando de la mano de la soledad.
    Tus fotografías merecen reconocimiento y exposición. Me pregunto si harás alguna?

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  2. Hola Jan, Bon dia. Una bona foto, que només al mirar-la ja s'endevine el fred que fà. Arbres completament despullats.cel grisi ningú pel carrer.

    BBBBrrrr!

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  3. Esa soledad también viene bien para recogerse con uno mismo.

    Besos

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  4. Me gusta mucho la profundidad de esta imagen, que bien da para estar profundamente con uno mismo.

    Un abrazo

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  5. Según cómo uno ande de ánimos, esa misma cualidad hace que nos invada en exceso la tristeza...mejor que venga todo en su justa medida! jejjejee
    Abrazos!

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  6. Impresionante profundidad que lleva la mirada hasta el final. Por aquí ahora nos refugiamos dentro también pero del calor que hace.

    Un abrazo.

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  7. Con el calor que hace hoy aquí se ma hace difícil imaginar un lugar donde los árboles no tengan hojas, el día sea gris y el frío obligue a la gente a refugiarse en casa.
    ¡Que bueno que nuestro mundo tenga esos contrastes !
    Aunque la foto me obligue a sentir esa soledad.

    Besos desde el verano.

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  8. En esos días, las calles arboladas paraecen conducir siempre a los cementerios.

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Apreciados amigos…
La gestión del tiempo es uno de mis problemas. En la medida de lo posible, contestaré vuestros comentarios.
Un abrazo